TikTok en Estados Unidos: Una Historia de Geopolítica Digital

El enfrentamiento entre Estados Unidos y China por TikTok desvela tensiones geopolíticas, acusaciones y una lucha por el control de los datos en el siglo XXI

La batalla en torno a TikTok en Estados Unidos trasciende el simple debate sobre una aplicación de redes sociales. Esta disputa revela tensiones geopolíticas, acusaciones cruzadas entre superpotencias y una lucha por el control de los datos en el siglo XXI. Mientras que TikTok, propiedad de la empresa china ByteDance, se ha convertido en una de las plataformas más populares entre los jóvenes, también ha sido el epicentro de un enfrentamiento entre Estados Unidos y China.

Seguridad nacional o estrategia política

El gobierno de Estados Unidos ha justificado su postura contra TikTok bajo el argumento de proteger la seguridad nacional. En marzo de 2023, el entonces Secretario de Estado, Antony Blinken, declaró: “TikTok representa una amenaza significativa porque podría estar compartiendo datos de usuarios estadounidenses con el gobierno chino”. La Ley de Inteligencia Nacional de China, adoptada en 2017, obliga a las empresas chinas a colaborar con las autoridades en materia de seguridad, lo que ha generado preocupación en Washington.

Desde Beijing la postura es otra, y el Ministerio de Relaciones Exteriores negó categóricamente estas acusaciones, calificándolas como un intento de Estados Unidos de frenar el crecimiento tecnológico de China. Hua Chunying, portavoz del ministerio, afirmó: “Estados Unidos utiliza la excusa de la seguridad nacional para suprimir a empresas extranjeras exitosas”.

El factor económico y tecnológico

Más allá de la seguridad, el conflicto también está vinculado al control económico y tecnológico. TikTok es uno de los mayores ejemplos del avance tecnológico de China en mercados dominados históricamente por empresas estadounidenses. La plataforma superó los 150 millones de usuarios activos en Estados Unidos (de una población de 330 millones de personas aproximadamente), desafiando a gigantes como Meta (Facebook, Instagram, WhatsApp) y Google (Android, YouTube).

“Estados Unidos teme perder su hegemonía tecnológica frente a China», señala Li Xing, analista de relaciones internacionales de la Universidad de Pekín. En respuesta, Washington ha adoptado medidas como el bloqueo de Huawei y ahora TikTok, medidas que Beijing percibe como proteccionismo disfrazado.

Espionaje, desinformación y censura

La administración estadounidense también ha acusado a TikTok de ser una posible herramienta de espionaje y desinformación. El FBI expresó preocupaciones de que la aplicación pudiera manipular algoritmos para influir en la opinión pública durante elecciones o generar desinformación que beneficie a Beijing.

Del otro lado del Pacífico, TikTok ha intentado distanciarse del gobierno chino. Shou Zi Chew, CEO de la plataforma, declaró en el Congreso estadounidense: “TikTok nunca ha compartido datos de usuarios con el gobierno de China y nunca lo hará si se lo solicita».

China contraataca

El gobierno chino ha acusado a Estados Unidos de hipocresía. “Si TikTok fuera estadounidense, no estaría enfrentando esta persecución», señaló Zhao Lijian, ex vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores. Beijing también ha denunciado el uso de tecnologías estadounidenses para espiar a ciudadanos y gobiernos extranjeros.

Las tensiones alcanzaron un punto álgido cuando China sugirió que podría tomar represalias contra empresas tecnológicas estadounidenses que operan en su territorio, como Apple y Microsoft, lo que podría desencadenar una escalada mayor al conflicto.

Implicancias geopolíticas

El conflicto alrededor de TikTok no es un caso aislado, sino un capítulo más en la rivalidad entre Estados Unidos y China. En juego está el liderazgo en tecnologías emergentes como inteligencia artificial, 5G y Big Data. Además, la capacidad de influir en narrativas globales mediante plataformas digitales está redefiniendo la diplomacia.

Los expertos también advierten que la fragmentación de internet, conocida como “Splinternet”, podría intensificarse (ya hablaré en algún otro articulo de esto en profundidad pero básicamente es la idea de que la Internet global se fragmente en redes aisladas controladas por gobiernos o empresas),. Estados Unidos busca desvincularse tecnológicamente de China, mientras que Beijing fomenta su propio ecosistema digital, creando una internet bipolarizada.

Los usuarios, atrapados en medio del conflicto

Mientras tanto, los usuarios de TikTok en Estados Unidos se enfrentan a la incertidumbre. Se han generado protestas de creadores de contenido y defensores de la libertad de expresión. La aplicación no solo es una herramienta de entretenimiento, sino también una fuente de ingresos para millones de personas.

Lo que está pasando con TikTok ejemplifica cómo las redes sociales se han convertido en armas de influencia geopolítica. Lo que inicialmente parecía ser un debate sobre privacidad y seguridad, ahora refleja una lucha por el dominio tecnológico y narrativo entre dos superpotencias mundiales.

Al final del día la pregunta que nos hacemos es: ¿Es TikTok un caballo de Troya de Beijing o simplemente una víctima de la rivalidad entre Estados Unidos y China? La respuesta puede no estar clara, pero lo que sí es evidente es que las implicancias de esta disputa van más allá de una aplicación. TikTok es un símbolo de la nueva era de la geopolítica digital, donde la tecnología y los datos son los nuevos campos de batalla.

Fuente: DiarioUno