Se alejan las chances de levantar el cepo a principios del 2025: los operadores del mercado especulan que será después de octubre
El gobierno argentino ha tenido que ajustar las expectativas sobre el levantamiento del cepo cambiario, con nuevas proyecciones que estiman que la flexibilización de las restricciones podría demorarse más de lo anticipado. Aunque en principio se esperaba que las restricciones se levantaran a principios de 2025, ahora los operadores del mercado especulan con una fecha posterior, posiblemente después de las elecciones legislativas de octubre.
El reciente salto del dólar, que subió hasta los $1.180, generó incertidumbre sobre la estabilidad del mercado cambiario y afectó las expectativas sobre la pronta liberación del cepo. Aunque el ministro de Economía, Luis Caputo, intentó restar importancia a la suba y lo atribuyó a una mayor demanda por las vacaciones, el aumento reveló que la estabilización del mercado aún está lejos. La brecha cambiaria, que en un momento se había reducido, volvió a ampliarse, lo que alimentó las dudas sobre el timing para levantar el cepo.
Caputo y el presidente Javier Milei habían reafirmado el compromiso de levantar el cepo en 2025, aunque el ministro de Economía admitió que la medida dependerá de la acumulación de reservas en el Banco Central, que aún se encuentra en terreno negativo. “No podemos levantar el cepo hasta tener las reservas adecuadas, y eso es una cuenta pendiente con el FMI”, explicó Caputo, refiriéndose a las dificultades para cumplir con una de las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional.
Las reservas del Banco Central, que siguen en terreno negativo con alrededor de US$4.500 millones, continúan siendo un factor crítico. Aunque en las últimas semanas se lograron compras de divisas por un total de alrededor de US$1.500 millones, los desafíos estructurales siguen afectando la capacidad del gobierno para acumular reservas de forma sostenida.
Impacto de las políticas económicas en el tipo de cambio real
A pesar de las dificultades, el equipo económico sigue adelante con su plan de estabilización, destacando logros como el superávit fiscal y comercial y la compra de dólares por parte del Banco Central. Caputo aseguró que el proceso de apreciación del peso es un resultado positivo de las políticas fiscales y monetarias del gobierno, y que el tipo de cambio real se ha estabilizado, lo que favorece la competitividad. El ministro de Economía destacó que el valor del dólar, con un oficial a $980 y el financiero a $1.100, es similar al que se tuvo en los primeros meses de 2016, después de la devaluación y la salida del cepo, pero con mejores fundamentos, como el superávit fiscal y la compra de dólares por parte del Banco Central.
Flexibilización de créditos en dólares
Caputo también confirmó que el gobierno flexibilizará las condiciones para los créditos en dólares, permitiendo que más sectores accedan a financiamiento en la moneda extranjera. Esto busca dinamizar la economía y facilitar el crecimiento sin comprometer la estabilidad cambiaria. Este cambio es considerado crucial para sostener la baja de la inflación mientras se continúa impulsando el crecimiento económico.
Riesgos por la apertura del cepo
A pesar de los avances, los economistas advierten sobre los riesgos de una apertura demasiado rápida del cepo sin contar con suficientes reservas. Daniel Artana, economista de la Fundación FIEL, alertó que si el gobierno levantara el cepo sin garantías de reservas, podría enfrentarse a una alteración cambiaria significativa debido a la fuga de divisas por parte de las empresas. Artana explicó que las empresas tienen cerca de US$6.000 millones de dividendos retenidos y que podrían enviar ese dinero al exterior si el cepo se abriera sin suficientes reservas.
Fuente: MisionesOnline