Salió campeona de la empanada se abrió dos locales y vende 100 docenas por día

Cristina Rojas salió campeona de la empanada y se abrió dos locales que venden 100 docenas por día. La cocinera trasladó sus delicias y es un éxito de ventas
Cristina Rojas se consagró campeona de la empanada tucumana y llevó sus delicias a Buenos Aires, donde se abrió dos locales y vende 100 docenas por día. Reconocida como la Campeona Nacional de la Empanada en 2008, esta tucumana decidió dejar su tierra natal para cumplir el sueño de instalar su propio negocio en plena Ciudad de Buenos Aires, de la mano de una receta registrada que respeta la identidad de su provincia y que conquistó a miles de clientes.

Cristina Rojas Lazarte nació en Famaillá, a 30 kilómetros de San Miguel de Tucumán, localidad conocida como la Capital Nacional de la Empanada. “Somos cinco hermanos, el varón falleció hace un tiempo. Las niñas de la casa aprendimos a hacer empanadas mirando a nuestra madre cómo las hacía y después de muchos años pusimos un local: El rancho de Beto, donde también están mis sobrinas”, contó en el sitio tn.com.ar.
Esa costumbre se convirtió en una fuente de ingresos. Así fue que comenzaron a colaborar con la economía de la casa, porque siempre les inculcaron una “cultura de conciencia de que las cosas hay que ganárselas”. “Por eso agradezco a mis padres: sin esa enseñanza hoy no estaría acá”, enfatizó.
Campeona de la empanada: los secretos de la empanada más rica del país
Cristina participó durante cuatro años en el Festival Nacional de la Empanada antes de lograr el título. Finalmente, logró quedarse con el primer puesto en la edición de 2008. “Me acuerdo de que me largué a llorar de la emoción”, recordó.

Ese fue un punto de inflexión en su vida. Es que, desde ese momento, empezó a viajar a otras provincias para enseñar cómo preparar su receta, que se registró con su nombre. Es que, aunque la empanada es parte de la cultura de los hogares tucumanos, se decidió patentar oficialmente la receta de Cristina para que haya una única manera de hacerla.
En específico, el relleno está compuesto por matambre cortado a cuchillo, cebolla blanca, cebolla de verdeo, huevo, comino y pimentón. En tanto, la masa se hace con harina y grasa. “Tiene que quedar un poco durita porque el relleno es jugoso y debe estar hecha a la medida de que tengas que hacer 13 repulgues”, precisó.
“Esta empanada es la que comíamos de chicas, en casa, con nuestras madres. Es algo que nos une”, remarcó en un video que compartió en su cuenta de Instagram.
Campeona de la empanada: de Tucumán a Buenos Aires
El proyecto de llevar sus empanadas a Buenos Aires surgió por el ofrecimiento de un amigo. “Yo dudé, pero mis hermanas no. Ellas estaban decididas a hacerlo y nos mandamos. Dejamos todo y vinimos a probar suerte. De poco empezó el boom”, relató.

En septiembre de 2024, abrió Las Rojas en el barrio porteño de Chacarita, acompañada por dos de sus hermanas y una sobrina. Allí mantienen una rutina de trabajo intensa: se levantan temprano para cocinar los rellenos y hacer los repulgues de las empanadas. Abren a las 11 y cierran alrededor de las 15.30. Luego se toman un breve descanso, antes de comenzar nuevamente con el proceso de cara al turno noche.
En febrero de 2025, apenas cinco meses después de la inauguración de su primer negocio, comenzaron a planificar un segundo local en Palermo, que finalmente abrió sus puertas en Ravignani 1871.
Además de la empanada tucumana tradicional, suman variedades como humita, pollo, verdura, jamón y queso, y sfijas (empanada árabe). “Aunque no fue una tarea fácil, logramos conseguir la misma grasa que se usa en Tucumán”, reveló.
Actualmente, y tal como figura en su cuenta de Instagram, Las Rojas Empanadas produce 100 docenas por jornada. “Hubo un día en el que debimos cerrar a las 22 porque nos quedamos sin stock de empanadas. Nos superó”, expresó.
Fuente: DiarioUno