Con gol de Di María y un campeón del mundo imparable, Rosario igualó 1 a 1 ante Godoy Cruz

Ángel Di María regresó al fútbol argentino después de 18 años para disputar el primer partido del Clausura 2025 con la camiseta de Rosario Central, en un marco espectacular que rindió homenaje al ídolo del club.

El regreso del “Fideo” fue muy esperado por los hinchas, quienes se volcaron al Gigante de Arroyito para recibirlo con los brazos abiertos. La emoción era palpable, con muchos fanáticos reviviendo el recuerdo de su último paso por el club en 2007, cuando dejó una marca imborrable a pesar de su juventud y su contextura física.

El recibimiento fue desbordante. Di María, acompañado por sus hijas Mía y Pía, ingresó al campo de juego entre fuegos artificiales, mientras una enorme bandera desplegada en una de las cabeceras recordaba sus palabras sobre su infancia en Rosario: «Ma, agarra la bici que volvimos al loquero más lindo del mundo». El estadio estalló de emoción cuando, al salir al terreno de juego, se proyectó un video en su honor y Claudio Tapia, presidente de la AFA, le dio la bienvenida al fútbol argentino.

Ya en el partido, Di María se paró en el extremo izquierdo y, a pesar de la dureza del planteo de Godoy Cruz, mostró destellos de su calidad. A los 25 minutos, asistió a Quintana y a Veliz, pero sus compañeros no lograron concretar. Sin embargo, fue en el segundo tiempo cuando se vio lo mejor del campeón del mundo. A los 8 minutos, hizo gala de su habilidad para desbordar a Morán y quedar frente al área, aunque perdió la pelota en la última acción.

Cuando el partido no daba señales de claridad para el equipo local, Carlos Dovalo cobró un polémico penal por un agarrón de Barrea sobre Véliz. Di María, como contra Boca en el Mundial de Clubes, asumió la responsabilidad y convirtió el 1-0, desatando la locura en las tribunas de Central. Su icónico corazón con la camiseta celebró su séptimo gol con la casaca Canalla.

Sin embargo, el regreso de Di María no estuvo exento de dificultades. A los 42 minutos, un pisotón de Poggi en un choque con Di María obligó al Fideo a salir del campo con dolor. En los minutos finales, el mismo Poggi, tras un desvío, empató el partido para Godoy Cruz, arruinando la tarde perfecta que los hinchas esperaban.

A pesar del empate 1-1, la vuelta de Di María dejó claro que su historia con el club y con el fútbol argentino está lejos de haberse terminado. Su regreso ya es un hito en la historia de Rosario Central, y promete ser recordado como uno de los momentos más emotivos del fútbol argentino en los últimos tiempos.

Fuente: Olé

También te podría gustar...