Este miércoles comienza el cónclave con 133 cardenales de todo el mundo que elegirán al sucesor del Papa Francisco

A pocas horas de que se inicie el Cónclave de 2025, la Capilla Sixtina del Vaticano luce completamente acondicionada para recibir a los cardenales electores, quienes, desde este miércoles 7 de mayo, comenzarán el proceso de elección del 267.º sucesor de San Pedro. En este evento trascendental de la Iglesia católica, los cardenales elegirán al nuevo Papa en un acto de total confidencialidad y solemnidad.
El emblemático recinto vaticano fue acondicionado con esmero para garantizar las condiciones adecuadas durante las deliberaciones. El proceso de preparación, coordinado por la Dirección de Infraestructuras y Servicios del Estado de la Ciudad del Vaticano, incluyó trabajos en los sistemas eléctricos y de climatización, la instalación de un piso técnico sobre el pavimento original y la revisión del mobiliario ceremonial.

Según el ingeniero Silvio Screpanti, subdirector del Área de Infraestructuras, más de 60 trabajadores, entre carpinteros, electricistas y floristas, se encargaron de estos ajustes.
Además, se acondicionaron más de 200 habitaciones en alojamientos como la Domus Sanctae Marthae y la antigua Casa Marta, para hospedar a los cardenales. Como medida de seguridad, todos los accesos al perímetro del cónclave han sido sellados, garantizando la confidencialidad del proceso.
La importancia del secreto durante el Cónclave
El secreto absoluto es una de las características más distintivas del Cónclave. Los cardenales electores, que participarán del proceso desde el miércoles, prestaron juramento de confidencialidad, comprometiéndose a no revelar nada sobre las deliberaciones. A su vez, se prohibirá el uso de cualquier instrumento de grabación o comunicación con el exterior, y cualquier intento de romper este secreto será castigado con la excomunión.
El inicio del proceso y las expectativas
El Cónclave comenzará con la tradicional Misa Pro Eligendo Pontifice, que se celebrará en la Basílica de San Pedro. Después de la misa, los cardenales marcharán en procesión hacia la Capilla Sixtina, donde comenzarán las votaciones. Se realizarán dos escrutinios diarios hasta que un candidato consiga la mayoría de dos tercios necesaria para ser elegido Papa.
Una vez electo el nuevo Papa, las papeletas se quemarán en una estufa especial, y el tradicional “fumata blanca” anunciará al mundo la elección. El nuevo Pontífice se retirará a la Sala de las Lágrimas para vestirse con la sotana blanca antes de ser presentado desde el balcón central de la Basílica de San Pedro.

El compromiso y la solemnidad de la ocasión
Screpanti destacó la importancia de este evento y la dedicación del equipo que trabajó en la preparación de la Capilla Sixtina. “Todos somos conscientes de que la Iglesia se muestra al mundo en este momento, y queremos contribuir con profesionalismo y respeto a esa imagen de sobriedad y eficacia que la ocasión exige”, expresó el ingeniero.